viernes, 29 de junio de 2007

Déjame soñar...

Ayer me lo perdí todo. Uno tiene sus planes y una llamada de teléfono te hace cambiarlos de un plumazo así, sin que puedas hacer nada. Una entrevista de trabajo me trastocó los planes y también la cabeza, porque no he podido dormir bien y llevo todo el día dándole vueltas, ¿qué debo hacer? ¿Cambiar? ¿Seguir aguantándo? ¿Jubilarme?

Vale, no es un problemón, pero cada cual le da vueltas a lo que quiere y es en estos momentos cuando te apetecen dos tipos de canciones. O las cañeras que te hacen olvidarte de todo (pero que en cuanto pasan sigues comiéndote el tarro) o una de esas que son como el abrazo de un amigo que te escucha. Ahora mismo los tengo a todos, mínimo a 30 minutos en metro de distancia, así que voy a optar por una de éstas.

En el 2003 me dejó con la boca completamente abierta la representación portuguesa, liderada por la genial Rita Guerra, que cantó aquello del Deixa-me sonhar (so mais una vez), una balada de las que te abrazan y no te sueltan, durante años.

Vestida como una sirena dorada recién salida del mar (recuerdo que ese mismo año su diseñador también le hizo el traje a la francesa, Louisa Baileche, que le debía caer mal, y que decidió despeinarse tanto en el escenario que acabó comiéndose sus propias raices y puntas antes de acabar la canción. Resultado: otro éxito sonado de Francia en a cola de la tabla, y eso que su canción tampoco era mala)....

Pero a lo que iba, recién salida del mar, y sobre uno de los fondos más impactantes entre los que nos regaló el festival de 2003, Rita Guerra hizo una interpretación sobervia, con un puente y uno de esos gritos que no acaban nunca, de los que demuestran la calidad vocal de un artista sobre el escenario, mejorando incluso mil veces la versión en estudio del tema. Eso no se ve muy a menudo.

El tema, sentimental, melódico, que va ascendiendo según avanza la canción, me impresionó. Abrázame hoy un poco Rita. Una auténtica lástima su puesto 22 porque ese año Portugal sí que se merecía estar mucho más arriba. Déjame soñar por unos momentos para centrarme después en lo que me tengo centrar, y para no acabar tan agotado para no poder asistir a los compromisos sociales que tiene uno estos días por la ciudad, que son muchos! (sí, hoy actúan los D'Nash, pero ya no prometo nada). Os dejo con este temazo portugués, de lo mejor en mucho tiempo.



Deixa-me sonhar, so mais una vez, pensar que vais ficar sempre junto a mim