viernes, 8 de junio de 2007

Vísteme despacio...

¿Por qué le han dado a Verska Serduschka (o como quiera escribirse) el premio Barbara Dex de este año? Para los no iniciados, este galardón se le concede al participante peor vestido de cada edición.
Generalmente, suelo coincidir con la votación popular (sobre todo cuando en el año 99 se lo dió a Lydia, por ir ataviada con el vestido -quien dice vestido, dice saco de patatas- de Ágata Ruiz de la Prada, pero este año me parece injusto.
Injusto porque Verska iba vestida de lo que tenía que ir vestida y, dentro de su personaje, estaba estupenda. Dicen que en IKEA se están frotando las manos con la de ventas que esperan de estrellas a lo Verska para coronar los abetos en la próxima Navidad.

Además, ¿por qué a Verska estando Natalia Barbu de Moldavia enseñando entrepierna con un modelo muy poco usable en esta temporada primavera verano? (ya parezco la Anne). También estaba tremenda Magdi Ruzsa, que cogió la primera camiseta que encontró en un Todo a 100 húngaro para ir a cantar el Unsubstantial Blues (sin sustancia alguna, como dice el título, en mi opinión). O bueno, las tres (o incluso 4) azafatas del guayominí. Fijo que alguno de los azafatos se quedó con ganas de vestir la faldita azul. Y no miro a nadie.
Mención aparte merece el gato que llevaba colgado del cuello el francés de Les Fatal Picards, que molaba un rato. No tanto, por supuesto, el traje rosa de chaqueta pantalón conjuntado con zapatos de tacón del cantante principal. ¿En serio les vistió Gaultier? ¿Dónde se ha dejado ese hombre la elegancia del traje de plumas de colores de Dana?

Eso sí, para mí, las mejores, las rusas (aunque el rollo colegiala ya esté muy visto, la del medio me pone. Tengo miedo), la georgiana (of course, qué elegancia, qué saber estar) y los coros de la winner, la Marija Molitva. ¿Qué opináis vosotros?