Lo admito
Ni siquiera que hoy sea el último día de trabajo antes de las vacaciones me anima. Lo admito. Odio a los albañiles, los carpinteros, los instaladores de conductos, los fontaneros y todo aquel que esté relacionado con el sector de la construcción. Incluso odio al primo de los carteles "hay guarda gitano" que cuelgan en toda obra. Grrr...
Lo admito, en algún lugar necesito desahogarme, y como total estáis la mitad de vacaciones, pues aprovecho en este diario. He estado pensando en alguna canción de Eurovisión que me cabrease de verdad, para hilarla en este post con mi anterior disertación, pero lo admito, no he encontrado ninguna.
Así que tanto admitir y admitir, llega hasta nosotros, ligerita de ropa, para aguantar las altas temperaturas, la rumana Sanda Ladosi. No es que participara sin mucho atuendo, es que su vestuario era una mezcla extraña entre meretriz, lumi y señora de moral distraida. Vamos, de putilla que iba, y eso que yo no tengo nada en contra de ellas, que Paz me encanta, pero vamos, que Eurovisión no es un lugar para ir vestido así, hija.
Y el pelo qué? Botes de laca corren por tus venas, mujer... para darte un aspecto grasiento, horrible. Y luego no eres fea, porque en fotos que se han visto por ahí eres hasta mona. Pintillas, pero mona. Pero eso te pasa por cogerte de estilista a la ex de tu marido, sí, la que fue un día tu mejor amiga y él su esposo... Que la gente es muy rencorosa!