Cómo me gustan los aeropuertos

Pues sí, pues sí, ayer superamos (ampliamente) los 2.000 visitantes, toda una gran cifra para este humilde diario que nació hace un par de meses con pretensiones meramente lúdicas... qué bien hablo. Y todo gracias a vosotros. El caso es que para celebrarlo podíamos haber ido al GayPride de Estocolmo, que se celebró ayer, con numerosas euroestrellas invitadas, pero sabéis quién apareció por sorpresa? La Gran Silvia Night! Eso si que es un GayPride! ¡Y nosotros perdiéndonoslo! ¿Qué estábais haciendo ayer, perracos, que no nos fuimos a Estocolmo?

Pues yo estaba, entre otras cosas, llevando a mi cuñá al aeropuerto, que se iba pa Suiza, a buscar Vampires. Ay que ver cómo me gustan los aeropuertos (este agosto tomaré 4 aviones!) y lo eurofrikis que son. No, no me encontré ni con los Scooch, que esos son muy de pega, ni con las Sestre (ya que estaban intentando revalidar su título de Miss Travesti Europea, conseguido por uno de ell@s en 2002) sino que se me vino a la cabeza otra gran canción aeroportuaria de este año: Copenhaguen Airport, de la preselección danesa, cantada por Annette Heick.

Reconozco que hasta hoy sólo conocía la versión en estudio, que me la bajé hace tiempo y me parecía bastante petarda (de esos temas que molan en el coche del Seben). ¿Qué tienen los aeropuertos que gustan tanto a los eurocantantes? Terminal 3, fly sometimes... que diría Linda Martin, nuestra diva y mentora.

Dinamarca, ya puesta a mandar una petardada este año al ESC, podría haber enviado esto a Helsinki en lugar de la Drama Queen, pero bueno, hubieran sido demasiadas líneas aéreas en el Hartwall Arena. El caso es que la actuación es curiosa. Ella no canta mal, pero la voz me parece demasiado nasal (comienza el despelleje) y los trajes de las azafatas demasiado serios, no? Pero elegantes, a la par que sencillos, eso sí.

El caso es que cuando llevas dos minutos viéndolo, el video parece aburrirte. Entonces aparecen los pilotos, o capitanes de vuelo, o lo que sean. El caso es que dices... ummm aquí va a haber tomate... Pero cuando les ves bailar con esa coreografía se te quitan las ganas de todo. Por no hablar de cuando el de la derecha se quita la camisa con tanto glamour que se le queda enganchada en el brazo y no hay quien se la quite. Se deshace de ella a espasmos, nen.

De todas formas, pienso que si hubiese ganado el Dansk Grand Prix, le hubieran preparado una buena puesta en escena y hubiera sido más digna aerocanción que la de Scooch (Brite). Aunque a saber qué dice la letra porque dedicarle una canción a un aeropuerto.. ¿qué será lo próximo? ¿a un puesto de helados? En fin, voy a ver si voy haciendo poco a poco la maleta. A quién quiero engañar, si siempre la dejo para última hora... Ya os contaré. Disfrutad del sábado!


Copenhaguen Airport...na nanana....