Hotel Miedo

Ayer, para ser domingo, la jornada fue bastante fructífera. Estuve haciendo un reportaje, luego encontré la chaqueta que tanto había buscado (golpe a la VISA de ipso facto) y por la noche, perreo en casa viendo la tele, ¿qué más se puede pedir? Poco más. Bueno sí, poder dormir tranquilo.

Y es que estuve viendo ‘Cuarto Milenio’, que no suelo porque me da zutto, pero estaba interesante. La temática giraba en torno a los hoteles y a lo paranormal que sucedía en muchos de ellos. Contaron anécdotas de todos tipos: asesinatos, suicidios, incendios, sombras que se arrastran por las esquinas… Total, que he dormido con un ojo abierto y con otro cerrado porque no, no vivo en un hotel, pero la historia que narraron que le había pasado a unos periodistas me dejó el miedo en el cuerpo. No vuelvo a dormir (solo) en un hotel. He dicho.

Si pienso en hoteles, y no porque me de miedo (o si), pienso también en Anna Vissi. Por dos motivos. El primero, porque la conocí en el Hotel Husa Princesa (¿el nombre le venía al pelo?) allá por marzo de 2006, cómo pasa el tiempo. Me pareció jovencísima para la edad que tenía (48, entonces), una suerte de Ana Obregón pero con sabor a yogur griego. Podría deciros que estuvo encantadora, simpática, amable… pero no. No puedo deciros cómo es porque a pesar de haber pactado y bien pactado la entrevista con la ERT, Anna Vissi se entretuvo una hora más de lo previsto con el medio que la entrevistaba antes (creo recordar que era Radio Rivas). Así que yo, que estaba ‘trabajando’ por gusto, decidí que esta diva no me iba a torear y la dejé con la palabra en la boca. No la entrevisté. Para digno, yo.

También me acuerdo de ella cuando pienso en hoteles por el videoclip que le hizo al ‘Everything’. Me parece que está bien, incluso la escena del puente me suena a película de jolibú, pero la historia no me gusta. Hija, si te pone los cuernos, ¿para qué vuelves con él? Todo muy melodramático, como fue su actuación en Atenas. Ese año la Vissi iba de super-mega-favorita (decían que iba a ser el festival de Eurovisión) y se quedó en Top 10 y gracias (de hecho, novena). La canción hay que reconocer que es buena, pero no ganadora. Y mucho menos estando ese año por allí Carola o quienes dieron la campanada, los monstruitos de Lordi.

La Vissi lo hizo bien (más que bien si la comparamos con su tema Auto-Stop, con el que representara a Chipre en los 80). Dos actuaciones más tarde, se nota que traía la lección bien aprendida. Pero apareció sola en el escenario, para darle más dramatismo, y el problema fue que ni tirándose al suelo de rodillas consiguió impactar al telespectador. Cantó bien, con fuerza, pero no fue suficiente. Una canción ganadora necesita mucho más que eso. Más que eso y un vestido mejor, porque esa suerte de casaca a lo tapete-cubre-mesa-camilla no convence en absoluto.

De todo lo que supuso el tercer paso de la Vissi por el ESC, me quedo con la canción, de bastante calidad, aunque reconozco que de las que le dieron en la pre, me hubiese gustado ver en Atenas la de ‘Beautiful Night’, mucho más acorde, por lo alegre y festivalera, para la noche de fiesta que preparó la ERT al ser la anfitriona del festival. Que tengáis buen lunes!

Cause I'm in love, with Everything, you aaareeee....