jueves, 20 de septiembre de 2007

La reina de la laca

Si uno no tiene todas las referencias es muy fácil que acabe haciéndose una idea equivocada de lo que va a ver. Yo pensé que 'Hairspray' iba a ser una comedia gay tirando a petarda y sin embargo es mucho más que eso. Es un musical bastante divertido en el que si consigues pasar la sorpresa de los 10 primeros minutos te lo pasas en grande. Lo que se tuvo que divertir John Travolta rodándola! Yo diría a las televisiones que aprendieran un poco de esta peli a la hora de preparar su participación en Belgrado. ¡Un numero así sería tan divertido! Sobre todo si logran hacer el efecto del marco de fotos (me encanta) aunque no os digo más por si la queréis ir a ver. No seré yo quien destripe el final.

Pues en el ESC pasa lo mismo, hay que tener todos los datos porque si no, puedes hacerte una idea equivocada. Si por ejemplo, piensas en el título 'Primadonna' y eres un eurofan jovencito, puedes creerte que en cualquier momento está por aparecer Alenka Gotar para darte una lección de lirismo. Si por el contrario lo que escuchas es la presentación que hizo Uribarri de la cantante invitada hoy al diario allá por 1997 ("es el ídolo pop de su país") te esperas que salga al escenario Kylie Minogue o su alter ego. Eso por lo menos.

Sin embargo, tras ambas situaciones, aunque te imagines otra cosa, se encuentra una mujer de armas tomar: Alla Pugachova, quien podría perfectamente aparecer en Hairspray porque laca usa muchísima. Ay del cambio climático. Posiblemente no haya intérprete rusa que haya quedado tan mal clasificada en el certamen (15 de 24) y que haya dado tanto que hablar entre los eurofans. Sería por su cardado a lo duquesa de Alba despeinada, por su colgante que debía pesar un quintal o por su modelito (botas incluidas) de maruja recién escapada de la movida madrileña, el caso es que Alla Pugachova se hizo un hueco en el corazoncito de los eurofrikis allá por los 90.

La canción ni es pop ni es moderna ni es festivalera. Es una canción que sólo Rusia podría haber exportado, cantada en ruso, y que quizá por esas dos razones sea por lo que me termina enterneciendo y, posiblemente, hasta agradando (sólo un poco), que no gustando para el festival. ¿No os hace gracia el final, cuando jalea, grita esos 'bravo' y nos deleita con su risa más falsa? Es como la bruja mala de cualquier serie norteamericana.

Cabe destacar que Pugacheva era la mujer (ya se divorció) de Philip Kirkorov (Rusia 1995 y autor del 'Work your magic' de Bielorrusia de este año). Ahora ya sabemos al menos a quién le copió el cardado.

I'm the queen of the spray, the queen of the spray... ¡La reina de la laca!