Perdónanos Europa, olvida esto
No llego, no llego, no me da tiempo… Toda la mañana pensando en el diario y en que no tenía ni tiempo para respirar. Ayer vino mi señora madre y vino conmigo al dentista, que menos mal porque ahora he decidido que odio a los dentistas (por mucho que me los encuentre en Chueca después, ya sabéis) porque hacen pupa y duele, y mucho.Pero bueno, como hoy estoy recuperado la llevaré a comer por ahí en cuanto termine de escribir este post y de hacer un par de cosillas para el trabajo, que joé, no he parado en toda la mañana, no se para qué tengo gente y becarios que joé, que curren un poco… No es verdad, pobres, si la verdad es que trabajan bien… pero bueno, hay que quejarse que si no se confían.
En fin, que después de comer y de dar un par de vueltas por el centro (no se si sabéis que toda madre que vive en una ciudad en la que no hay Corte Inglés, cuando llega a la capital se vuelve loca por visitarlo) la voy a llevar de sorpresa a ver la obra de teatro de Carmen Machi. Y es que si, mi madre, como yo, es fan de Aida, y tenemos que ir a verla. De lo que no es fan es de Eurovisión, así que no se a quién le he salido yo! (¿soy adoptado?). Bueno, ayer le puse en casa el diario y algún video. La Serdushka le hizo gracia, pero cuando vio a la Terremoto de Alcorcón con el Taims gous bai le gustó mucho más. Se rió a carcajadas.
En lo que es sabia toda madre, aunque no sea eurofan, es en calificar la actuación de… ¡¡Las Ketchup!! Nuestras grandes amigas… (ironía). “Qué cosa más fea!” fueron exactamente sus palabras. Y es que este tema daría para hablar muchísimo, primero por el dedazo que supuso su elección por parte de Televisión Española y, segundo, por la penosa actuación que hicieron en Atenas.
Ya en las ruedas de prensa se veía venir el interés de las cuatro hermanas. ¿Por qué metieron a la cuarta si siempre habían sido tres, para chupar del bote?. El caso es que en una rueda de prensa les preguntaron que cuál era su canción favorita de Eurovisión (pregunta típica en todo festival) y la respuesta fue: “No nos sabemos ninguna…”. También me han contado que en la fiesta de los países del Big4 aquel año cada representante cantó su canción menos ellas, que en lugar de cantar el Bloody Mary prefirieron cantar el “Aserejé”. ¿Por qué? No se la sabían bien, les importaba un pito el certamen y sólo querían vivir del cuento?.
Pero aparte de todo eso, si su actuación sobre el escenario (donde a las niñas se les quedaban los zapatos enganchados y protestaban) hubiera sido decente, posiblemente nos hubieran hecho olvidar a los eurofans todo el tema del dedazo en su elección. Sin embargo, actuaron sin ganas, con una coreografía horrible y que no hay quien se explique, lo de las sillas giratorias queda muy bien en la peluquería, pero ahí no. Tanto para adelante y para detrás, ahora cojo el micro ahora lo suelto… Y con un careto… A la que dice “Un bloody mary por favor” mejor que no la hubieran enfocado cuando hablaba… Dios que cara!
Y es que "Aquí hubo tomate", porque podemos hablar de los bailarines, que estaban ahí sin ton ni son, danzando a su bola por delante de ellas, por hacer algo. Ni siquiera en la primera participación de Ucrania en el 2003, con el ‘Hasta la vista’, en el que había una bailarina a lo caja-de-musica que no pegaba ni con cola quedaba tan mal… Dutifrí, dutifrí, dutifrí! Europa, por favor, borra este momento de tu mente.
En fin, podría hablar tanto de estas cuatro que hicieron que incluso a los eurofans nos diera vergüenza verlas (así que no digamos ya al resto de España y, por ende, de Europa), que daría para siete post, pero tengo prisa. Y es que la canción era mala hasta decir basta, no había por dónde cogerla y encima, Albania nos dio 12 puntos. Por favor, que alguien me lo explique.
Bueno, os pongo el video (porque es una tradición, no porque lo vayáis a ver) y os dejo que me enrollo mucho y tengo muchas cosas que hacer en el trabajo antes de irme a por mi madre, que aunque no sea eurofan, no por eso le guardo rencor y no la voy a dejar esperando por ahí en los madriles!
Uf que mal cuerpo se me ha puesto para ser inicio de fin de semana! En el post de mañana lo arreglo ¡Perdónanos Europa!
En fin, que después de comer y de dar un par de vueltas por el centro (no se si sabéis que toda madre que vive en una ciudad en la que no hay Corte Inglés, cuando llega a la capital se vuelve loca por visitarlo) la voy a llevar de sorpresa a ver la obra de teatro de Carmen Machi. Y es que si, mi madre, como yo, es fan de Aida, y tenemos que ir a verla. De lo que no es fan es de Eurovisión, así que no se a quién le he salido yo! (¿soy adoptado?). Bueno, ayer le puse en casa el diario y algún video. La Serdushka le hizo gracia, pero cuando vio a la Terremoto de Alcorcón con el Taims gous bai le gustó mucho más. Se rió a carcajadas.
En lo que es sabia toda madre, aunque no sea eurofan, es en calificar la actuación de… ¡¡Las Ketchup!! Nuestras grandes amigas… (ironía). “Qué cosa más fea!” fueron exactamente sus palabras. Y es que este tema daría para hablar muchísimo, primero por el dedazo que supuso su elección por parte de Televisión Española y, segundo, por la penosa actuación que hicieron en Atenas.
Ya en las ruedas de prensa se veía venir el interés de las cuatro hermanas. ¿Por qué metieron a la cuarta si siempre habían sido tres, para chupar del bote?. El caso es que en una rueda de prensa les preguntaron que cuál era su canción favorita de Eurovisión (pregunta típica en todo festival) y la respuesta fue: “No nos sabemos ninguna…”. También me han contado que en la fiesta de los países del Big4 aquel año cada representante cantó su canción menos ellas, que en lugar de cantar el Bloody Mary prefirieron cantar el “Aserejé”. ¿Por qué? No se la sabían bien, les importaba un pito el certamen y sólo querían vivir del cuento?.
Pero aparte de todo eso, si su actuación sobre el escenario (donde a las niñas se les quedaban los zapatos enganchados y protestaban) hubiera sido decente, posiblemente nos hubieran hecho olvidar a los eurofans todo el tema del dedazo en su elección. Sin embargo, actuaron sin ganas, con una coreografía horrible y que no hay quien se explique, lo de las sillas giratorias queda muy bien en la peluquería, pero ahí no. Tanto para adelante y para detrás, ahora cojo el micro ahora lo suelto… Y con un careto… A la que dice “Un bloody mary por favor” mejor que no la hubieran enfocado cuando hablaba… Dios que cara!
Y es que "Aquí hubo tomate", porque podemos hablar de los bailarines, que estaban ahí sin ton ni son, danzando a su bola por delante de ellas, por hacer algo. Ni siquiera en la primera participación de Ucrania en el 2003, con el ‘Hasta la vista’, en el que había una bailarina a lo caja-de-musica que no pegaba ni con cola quedaba tan mal… Dutifrí, dutifrí, dutifrí! Europa, por favor, borra este momento de tu mente.
En fin, podría hablar tanto de estas cuatro que hicieron que incluso a los eurofans nos diera vergüenza verlas (así que no digamos ya al resto de España y, por ende, de Europa), que daría para siete post, pero tengo prisa. Y es que la canción era mala hasta decir basta, no había por dónde cogerla y encima, Albania nos dio 12 puntos. Por favor, que alguien me lo explique.
Bueno, os pongo el video (porque es una tradición, no porque lo vayáis a ver) y os dejo que me enrollo mucho y tengo muchas cosas que hacer en el trabajo antes de irme a por mi madre, que aunque no sea eurofan, no por eso le guardo rencor y no la voy a dejar esperando por ahí en los madriles!
Uf que mal cuerpo se me ha puesto para ser inicio de fin de semana! En el post de mañana lo arreglo ¡Perdónanos Europa!
