lunes, 4 de febrero de 2008

La vie est un rollercoaster

No, no he muerto, al menos todavía. Jaja, porque nunca se sabe. No he muerto pero sí que estoy muerto, completamente. No me acuerdo de la última vez que dormí, jaja. Quien diga que en Madrid no se celebra Carnaval, miente, y si me visteis, no era yo. Y quien diga que la vida no es un rollercoaster miente. Es una auténtica montaña rusa, como diría Ronan Keating en su actuación en Eurojunior, que me encantó, por cierto. En fin, que no quiero bajarme del coche! Que locura, mon dieu, que locura.

El caso es que siento mucho decepcionaros pero este fin de semana me dejé olvidada la etiqueta de eurofan que llevo siempre puesta y no he sido capaz todavía de ponerme al día. No he visto quién ha ganado en Dinamarca, ni siquiera recuerdo los otros dos países que celebraban este fin de semana su final… ni tampoco he escuchado la canción que ha presentado Davinia, con las ganas que tengo… En fin, que acabo de aterrizar de nuevo, como quien dice, en mi universo eurofan, así que prometo ponerme al día en cuanto llegue a casa y a partir de mañana comentarlo todo, todito todo… Vosotros podéis ir dándome pistas de por dónde han ido los tiros este finde…

Y mientras, yo os dejo con una canción que, como no podía ser de otra manera, tenía que ser francesa… Una balada estupenda para empezar la semana. Ay Mon dieu o como se diga…

Hace falta tiempo...