No doy crédito

No doy crédito. La selección musical que ha realizado TVE me ha dejado perplejo. Ayer corrí de un lado para otro sin darme cuenta de que se iban a anunciar los 5 nuevos candidatos... y cuando caí, y entré en la web, casi hubiera preferido no haberlo sabido...
Ni una de las favoritas... Me parece bien que hayan elegido a Ell*as, aunque no se lo deben creer ni ellas... El sello de Andermay ha gustado al Ente Público, incluso a pesar de que Ander había escrito una carta en la que reconocía que se había equivocado con la canción y que no había sido muy exitosa...

También se han dejado seducir por Innata, tras haber ganado el concurso de Eurovision Spain... y de las otras tres... mejor ni hablar, aunque bueno, a una ya la descalificaron, pero en su lugar... no nos han dado a Mayteeee! sino una canción que parece salida de una película trash que alguien ideó pensando en Almodóvar. Terrible. La base no es mala, pero la letra.. ufff! Aish... que no, que no, de todas formas, elegir una canción que sólo tiene 87 votos, y que quedó la cuatrocientos y pico no me parece muy acertado... Si seguro que no se votó ni el cantante, y se debió olvidar del concurso nada más mandar la canción al MySpace... Pero bueno, no hablemos de aciertos ni de justicia en esta pre, que no tendremos suficiente...

Ayer fue un buen día porque al fin conocí a Nils, y tomamos un interesante café en Madrid en el que el tema giró en torno a Eurovisión, pero no todo fue el ESC, y eso es bueno, ¿no? Hubo tiempo para hablar de muchas cosas, pero por numerosos motivos, el tema de hoy tiene que ser danés, sin duda (jajaja!), así que qué mejor que invitar al diario a la trini (Trine Jepsen) y a Mister Países Nórdicos (Michael Teschl) para que nos canten el tema con el que representaron a su país en 1999 en Israel.

Es una canción sencilla, típica danesa, que repite la fórmula chico-chica tantas veces usada y que Dinamarca volvió a repetir en 2001 con Rollo & King, aunque esta vez con menos suerte, quedando en un noveno lugar, que no está mal. Obviamente ella tiene mil veces más voz que él, aunque lejos de ser un busto parlante, Michael salva el papel...

Apruebo a los dos, que no al coro que llevaron, pues los dos chicos van desacompasados todo el rato, máxime cuando les enfocan las cámaras, será para lucirse más... Y la puesta en escena fue sosa hasta decir basta, como en sí lo es la canción, sin embargo, a mi no me desagrada para tenerla de fondo... mientras os escribo estas líneas... en las que prometo no volver a darle mucha cancha a nuestra pre, que ya suficiente cruz tenemos los eurofans españoles... Sigamos mirando hacia adelante, con la única esperanza de que no se terminen de cargar el festival... :S

This time i mean it oh baby...