Las Spice Girls a los 40
El día de ayer pasó de largo por el diario como una exhalación. No puede decirse que estuviera muy liado, tanto como para no actualizarlo, pero si os digo que no se en qué invertí (malgasté) mi tiempo ayer no os estoy mintiendo...
En fin, a veces es así. El tiempo es la medida de todas las cosas (que diría Alf Poier, aunque él se refería a los hombres) y, posiblemente el bien más preciado. Muchas son las canciones que se le han dedicado a lo largo del festival. Se me vienen muchas a la cabeza, pero sonrío al recordar sobre todo la de unas chicas holandesas allá en Dublin'97, ese festival que tanto nos fascina a la mayoría de los que nos movemos en torno a este diario.
Respondían al nombre de Mrs. Einstein y nos cantaban algo así como 'Nadie tiene tiempo para mí' (según la traducción de Uribarri, que yo de holandés se poco). Me gustan porque son como las Spice entradas en años y en carnes. Las veo con sus caras así hinchadas y me dan un aspecto de madre enternecedor. Madre holandesa, claro, que lleva sus niños al colegio.
De la canción me parece fabulosa la orquestación. Los primeros acordes son geniales y luego el tema en sí, pues se deja escuchar, qué queréis que os diga. La coreografía es simploncilla, de baile de madre en verbena de pueblo, pero por eso me gusta. Para alante, para detrás... cuando nos juntamos hacemos un espasmo... Lo bueno es el corro final, que no se pusieron a hacer la conga de milagro.
La iluminación de inicio, en ese gran escenario, me fascina. De ellas destaco a la del centro (pintilla de ser la más fresquilla del grupo, por decirlo fino) y la pelirroja, que cada vez que la enfocan tiene una cara de... ¿qué hago yo aquí? ¿quién soy? ¿Cuánto son dos más dos? Vamos, que si fueran las Chicas de Oro serían Blanche y Dorothy, respectivamente. De todas maneras, estas no son las chicas de oro, son las chicas que se juntan a tomar café y a hablar de sus maridos después de llevar a los niños al cole. Que si, que os lo digo yo. Me encantan, tan acompasadas ellas!
Sea como sea, me gusta esta actuación, la recuerdo con mucho cariño. Recuerdo también que fue la primera vez que me di cuenta de que el 'review final' con todas las canciones estaba grabado, pues ellas aparecían con otro vestuario en el repaso...
Respondían al nombre de Mrs. Einstein y nos cantaban algo así como 'Nadie tiene tiempo para mí' (según la traducción de Uribarri, que yo de holandés se poco). Me gustan porque son como las Spice entradas en años y en carnes. Las veo con sus caras así hinchadas y me dan un aspecto de madre enternecedor. Madre holandesa, claro, que lleva sus niños al colegio.
De la canción me parece fabulosa la orquestación. Los primeros acordes son geniales y luego el tema en sí, pues se deja escuchar, qué queréis que os diga. La coreografía es simploncilla, de baile de madre en verbena de pueblo, pero por eso me gusta. Para alante, para detrás... cuando nos juntamos hacemos un espasmo... Lo bueno es el corro final, que no se pusieron a hacer la conga de milagro.
La iluminación de inicio, en ese gran escenario, me fascina. De ellas destaco a la del centro (pintilla de ser la más fresquilla del grupo, por decirlo fino) y la pelirroja, que cada vez que la enfocan tiene una cara de... ¿qué hago yo aquí? ¿quién soy? ¿Cuánto son dos más dos? Vamos, que si fueran las Chicas de Oro serían Blanche y Dorothy, respectivamente. De todas maneras, estas no son las chicas de oro, son las chicas que se juntan a tomar café y a hablar de sus maridos después de llevar a los niños al cole. Que si, que os lo digo yo. Me encantan, tan acompasadas ellas!
Sea como sea, me gusta esta actuación, la recuerdo con mucho cariño. Recuerdo también que fue la primera vez que me di cuenta de que el 'review final' con todas las canciones estaba grabado, pues ellas aparecían con otro vestuario en el repaso...
Nadie tiene tiempo para mí