El síndrome del escenario vacío

Crisis, crisis. Cuando aún no nos hemos recuperado de la resaca post-semi1, hoy tenemos la semi2, mucho más atractiva y que promete no aburrir a las ostras y a los eurofans! Por ahí no viene la crisis, sino que viene por el hecho de que tengo un compromiso laboral ineludible hoy a las 20 horas, lo que me impedirá llegar a tiempo a la morada del gran Nils para hacer uso de su banda ancha y ver el ESC 2.0

Ya tengo asumido que me perderé a mi Islandia y a mi Perrelli (primero y segundo en el orden de actuación) en directo. Si veo que me pierdo mucho, desisto y luego lo veo en diferido, intentando no enterarme de los resultados, en Eurovision.tv Qué vida más dura la del periodista eurofan!

Aparte de eso, hay un tema que se me quedó en el tintero ayer respecto a la primera semifinal: el dolor que me producía ver las gradas vacías. No se a qué se ha debido. Espero que sea por el hecho de que las pusieron demasiado caras y la gente pasó de la semifinal y que eso sirva para que la UER el año que viene no se columpie intentando sangrar al eurofan.

De todas formas, creo que la televisión serbia debía haber acudido aunque fuera a los colegios de Belgrado a repartir entradas gratuitas. Mucho mejor llenar la grada central que ofrecer planos generales en los que sólo se veían unos cuantos eurofans apiñados contra el escenario.

Otra crítica se la voy a hacer a los eurofans israelíes presentes en el Belgrado Arena, encabezados por mi conocido Eran. Si, ya sabemos que Israel este año lleva una canción estupenda, pero de ahí a que cada vez que enfoquen al cantante a ras de suelo el plano se vea cortado por banderolas enormes de Israel, martillos hinchables con los colores de la bandera de Israel... pues es eliminar toda posibilidad de visibilidad a quienes están detrás (y a los 300 millones de telespectadores que lo vemos por televisión), no creeis? De todas formas, me consta que la organización ya les ha dado más de un toque por este motivo, pero me da que hoy va a ser igual... Fijaros quienes podáis verlo por televisión.

Respecto al programa de anoche... ¿qué deciros? Que afortunadamente para mi salud mental, no lo vi entero, que tan sólo llegué a ver unos 10 minutos en total y que ya a la 1 dije, yo me voy a dormir. Me bastó con escuchar a Raffaella Carrá decir que la última vez que la RAI retransmitió el festival fue con Sergio Dalma. Ah vale, ahora resulta que los italianos no pudieron ver por ejemplo a Jalisse en 1997, ya que la RAI no lo retransmitió, hay que joderse.

En fin, que no se quién se gastó ayer los dineros para elegir a la mejor canción española en el ESC. De hecho me acabo de enterar esta mañana que se eligió precisamente 'Bailar pegados'. Pues yo hubiera elegido sin duda el Dime, aunque no estaba entre las escogidas (¿quién se encargó de la selección?) o, entre las propuestas, el La, la, la... ya puestos... (además lo cantó Rosa, que eso sí lo ví). También vi a Alaska con una versión 'tecno' del 'Un mundo nuevo' que estuvo bien. Y a Marta Sanchez y otros artistas 'consagrados', que ya hay que tener valor para participar en un programa como este... ¿significará que algún día la veríamos en el ESC, para deleite de mucho eurofan? No creo.

Bueno, que me enrollo. Que 'Bailar pegados' es la mejor canción. Vale, pues bien. Para mí no, aunque reconozco que es bonita y está bien construida, y que Sergio Dalma (quien no es santo de mi devoción) realizó una interpretación bastante profesional. Sin embargo, siempre recordaré este tema por el horror que sufrí cuando vi el videoclip en TVE2... y vi a Sergio Dalma ayudando a la abuela con las bolsas de la compra. Casi me da algo , como cuando ví a la abuela que barría la calle en el de las Son de Sol.

Claro que ambos temas no son comparables y Dalma obtuvo un meritorio lugar, haciéndonos soñar incluso con la victoria. No me voy a liar ahora a destripar o alabar este tema... quede como una gran actuación española y, sobre todo, como un ejemplo de un artista que no fue devorado por el festival sino que construyó su carrera a partir de su partipación en él.

Con los delfines...