Sobre la final, del 13 al 2
Aquí sigo, con complejo de Fernandisco (uf qué gordete se ha puesto y cómo pasan los años, no?) haciendo mi del 25 al 1 particular, desgranando poquito a poco la final para entrar en materia -a seguír analizando canciones en profundidad- a partir de mañana, que ya veréis...
Ayer nos quedamos con Vania en el puesto 13, y hoy retomamos el repaso con los piratas, que quedaron un puesto más arriba gracias a su tema repetitivo y chabacano, no me gusta. Georgia mejoró en un puesto la clasificación de la sin par Sopho. Vestida terriblemente de negro, pero con su efectista cambio a blanco, a mí la actuación de este país sigue siendo una de las que más me gusta -y de la que más me sorprendió- la noche del sábado.
Que Bosnia se colase en el Top 10 es algo que sólo se explica porque, realmente, dió un buen espectáculo, porque obviamente la calidad musical no es lo que andamos buscando, que dirían en cualquier casting de OT. Pero a mí lo de las novias haciendo calcetas de colores, me encantó, que queréis que os diga, y ese detalle parece que bien vale un puñado de votos. El resto, prescindible, claro.
En novena posición se nos quedó bracitos-israel. Bueno, en realidad es injusto calificarle así, pues deberíamos recordarle por la magnífica interpretación, por la gran voz que da vida a un tema entrañable... Bravo Israel, muy bien hecho. Bravo Dana, por escribir este tema. Gracias.
Octavo puesto para Azerbaiján (o como se escriba), por el fantástico show y la fantástica voz del ángel blanco. A mí me gusta, qué queréis que os diga. Hasta el momento había ignorado esta canción, pero ahora hasta soy capaz de tararear el estribillo day after day. Bien, vale.
Los turcos siempre arrastran votos, y Deli no se iba a quedar sin ellos. Sin caerse del Top10, esta vez bajan al ocho, pero merecido. Bien de nuevo. Serbia, séptima, a pesar de que para mi gusto el tema de este año pasó algo desapercibido para la calidad que tenía. Esperábamos quizá más, pero Europa se está cansando de que Serbia repita canción cada año. Siempre tendrá a sus vecinos cerca para arroparles.
Noruega es sin duda la sorpresa del año, porque que arrasara de la forma que lo hizo en su semi, colándose en la final cuando todo el mundo pensaba que era el comodín del jurado (que no del público) y que el sábado quedase sexta, implica que el tema tiene un mérito que aún yo tengo que encontrar. Para mí era de mitad de tabla, pero bueno.
Armenia cuarta con un tema que podía haber sido ganador si la puesta en escena hubiera sido más efectista y si Sirusho hubiera sido más comunicativa y expresiva en el escenario. Grecia es la otra sorpresa del año. Vale que los helenos arrastran votos allá por donde van, pero... quizá este año iban un poco justos de calidad para meterse en el top 3, no? De todas formas, Kalomira parece que divirtió, y que su libro encerraba más de una lección para muchos otros participantes.
Y llegamos a la segunda clasificada. Lo siento, Ani, lo siento mucho, porque creo que te han robado el título este año. Si había un tema que merecía ser recordado una y otra vez, en resúmenes, discotecas, y demás lugares de todo tipo de ambiente, era el tuyo. La interpretación fue magistral y tenía todos los ingredintes para ser el ganador este año. Una base perfecta, ritmo movedizo y, sobre todo, profesionalidad sobre el escenario.
Lo de las cajas que se iluminan maravilló a todo el mundo, pero yo me quedo con tu forma de bailar, de saltar sobre esos taconazos, de jalear al público con la mano, y de decir eso de... "baby don't call me baby" que tanto me gusta. Y por supuesto, con tu movimiento de cabeza... ¿un guiño refinado y actualizado a Raffaella Carrá?
Un 10 para Ucrania. No quería ir el año que viene a Kiev porque mis recuerdos del festival del 2005 están un poco empañados por lo de 'politizado' que tuvo ese certamen, pero sinceramente, creo que te mereciste ganar, sin duda. Bravo por tí, Ani. Bravo. Eres la ganadora de este año para el Diario de un Eurofan. Vale que no consuela, pero quiero darte las gracias por habernos hecho disfrutar este año y por hacernos pensar que no todo lo que huele a exrepública soviética se lleva puntos y votos así como así, porque sí y ya está. Y mañana, prepárate, Dima.
Shady Lady, are you ready?