viernes, 22 de junio de 2007

Orgullo (poco) eurofriki

Pues al final parece que recula y no, Marija 'Molitva' no se va a pasar estos días por Madrid a pesar de que la ciudad va a convertirse en la capital gay de Europa… De hecho, según el cartel, va a ser el orgullo menos eurofriki de los últimos años (qué tiempos aquellos en los que venía Sertab o la Chichirizou…).

Por lo que he visto, sólo Andermay (autores del Dime, quienes todavía no se han repuesto de la interpretación de Beth) van a presentar su segundo disco (si es tan bueno como el primero, guau!) pero joé, me han puesto una reunión de la comunidad de vecinos a esa hora, ¡también es mala suerte!

Bueno, también veremos a los D’Nash el viernes próximo. Eso sí, no? Bueno, si no nos los impiden las carpeteras, que se adueñarán de la Plaza de Vázquez de Mella. ¿Pero qué es esto? ¿Pero qué invento es este?

[edito gracias a nuestro amigo Corredero, thanks nen :), También actuará Massiel cantando su 'Busco un hombre'! Canción que no me hubiera importado ver en Helsinki cantada por ella, claro, con su boa, su saber estar, su movimiento a espasmos, wowowowow! y por supuesto, también tendrá media hora de escenario Diego Cosío!! (Cantará su Invincible? No me lo pierdo! Vamos, que no me lose it!)]

Qué recuerdos del orgullo del año pasado. Ahí fue cuando re-descubrí a Tina Karol. Durante el festival del año pasado me gustó, pero no había conseguido conquistarme del todo. Pero al pasar una de las carrozas del desfile con la canción, me cautivó. La verdad es que desde entonces he visto y visto su actuación mil veces hasta parecerme que su top 10 fue injusto, que tenía que haber sido, mínimo, top 5.

La chica tiene voz (como demuestra en su solo, que pone la piel como escarpias, como diría la del candelabro), la coreografía es efectista, aprovecha el momento guiño a la cámara (que a la gente de a pie le resultará ‘mira qué espontánea la chica esta’, pero que todo eurofan sabe que está más preparado eso que la fabada de lata) De eso sabe bien Carola y otras divas…

Según una amiga mía, la clave del éxito estuvo en sus botas, divinas! (claro que ella se fija en eso porque tiene más de 100, pero yo las veo y me parecen incluso un poco horteras). Sea por eso, sea por su salto a la comba, por sus rizos, por el vestidito blanco o por sus grititos, merece pasar a la categoría de Divas del festival. ¿La recordamos?



Gracias Ukraine, por los buenos momentos que nos has dado estos dos últimos años.